He estado ¿cuánto? ¿Una semana en esta villa? Creo que ni eso. La idea del viaje mayormente era desestresarme de tanto trabajo, ¿y qué consigo? Ahora voy a regresar peor de como estaba al llegar. Ya he recorrido casi toda la aldea para tener un recuerdo de la misma, pues es muy improvable que regrese; soy capaz de disfrazar a Kankuro de Kazekage para que venga en mi lugar en caso de tener que asistir a alguna reunión importante.
Mi última parada, la academia ninja; recuerdo la vez en que vine aquí con Naruto, solo de él me llevo buenos recuerdos, porque lo que son los demás, sencillamente me han desesperado desde que pisé este lugar.
Ingreso a la academia para echar un último vistazo, me dirijo al salón que guarda esos recuerdos tanto como mi memoria, uno de los días más especiales de mi vida. Desplazo mi mano por sobre la mes, esa mesa, la que usamos ese día.
-Naruto...- susurro para luego escuchar un sonido, volteando para ver quien más se encuentra en el lugar-Oh, eres tú...